El ocaso del Imperio comienza en América Latina.
Los dos genocidios más grandes de nuestra historia han sido los producidos por el imperio español y los inducidos por el imperio yanqui. Esta verdad es dolorosa, más aun cuando fueron instrumentalizados hombres de nuestra propia tierra, entrenados muchos por los yanquis en la “escuela de las américas”, los que estaban en connivencia con aquellos extranjeros patrios que llamamos “oligarquía”; esa cruza endogámica de familias pretenciosas, que manejan parámetros racistas, extranjerizantes, e imperiales.
Han asesinado durante generaciones el germen más puro y dotado de nuestra tierra. Pero el genio y talento vuelven a repetirse y nuevos hombres retoman la vieja senda, y los pueblos masacrados vuelven a parir nuevos hijos y los muertos renacen por doquier y se mutiplican. Esta es la explicación de lo que sucede hoy en América Latina, esta es la explicación de la unanimidad de la OEA enla condena al golpe en Honduras. Esta es la explicación de que nuestros pueblos estén aprendiendo a hacer la revolución esta vez sin derramar su sangre. Infinita sangre que ha fertilizado nuestra tierra hasta hacer brotar la senda.
El Norte interno representado en nuestros países por los grupos económicos y la prensa no nos apoyarán, Europa y EEUU menos. Pues ¿cómo los parásitos festejarían la higiene del animal?
La riqueza del Norte se ha constituido en la pobreza del Sur.
El Norte nunca aceptará nuestra liberación a menos que le sea impuesta.
Decir que el Norte mirará con buenos ojos nuestro progreso es una gran falacia.
Sólo pidámosle a un europeo que imagine ¿qué pasaría si un gobierno latinoamericano derrocara a uno europeo por que ha desviado su rumbo?
Imitar al Norte, como quisiera Vargas Llosa, es lo peor que pudiéramos hacer, pues nos condenaríamos al triste papel del imitador de barrio del cantante famoso y adinerado. Un patético inalcanzable.
Además el Norte no es un ejemplo a seguir en sentido alguno, pues sus pocos logros culturales les han costado miles de errores; por ejemplo, solo han descubierto los derechos humanos luego de masacrarse hasta lo inverosímil,luego de dos guerras mundiales, y de miles de años de barbarie. Barbarie que han frenado solo entre ellos, pero no hacia nosotros. Han descubierto la ecología luego de destrozar casi a totalidad su propio entorno natural y bastante del nuestro.
Lo que debemos aprender de noroccidente son las tácticas y estrategias de nuestra liberación para aprender a vencer de manera definitiva. Como Lautaro el joven mapuche que se mezcló entre españoles con dominio y fé, desentrañando el secreto de la victoria.
Han asesinado durante generaciones el germen más puro y dotado de nuestra tierra. Pero el genio y talento vuelven a repetirse y nuevos hombres retoman la vieja senda, y los pueblos masacrados vuelven a parir nuevos hijos y los muertos renacen por doquier y se mutiplican. Esta es la explicación de lo que sucede hoy en América Latina, esta es la explicación de la unanimidad de la OEA enla condena al golpe en Honduras. Esta es la explicación de que nuestros pueblos estén aprendiendo a hacer la revolución esta vez sin derramar su sangre. Infinita sangre que ha fertilizado nuestra tierra hasta hacer brotar la senda.
El Norte interno representado en nuestros países por los grupos económicos y la prensa no nos apoyarán, Europa y EEUU menos. Pues ¿cómo los parásitos festejarían la higiene del animal?
La riqueza del Norte se ha constituido en la pobreza del Sur.
El Norte nunca aceptará nuestra liberación a menos que le sea impuesta.
Decir que el Norte mirará con buenos ojos nuestro progreso es una gran falacia.
Sólo pidámosle a un europeo que imagine ¿qué pasaría si un gobierno latinoamericano derrocara a uno europeo por que ha desviado su rumbo?
Imitar al Norte, como quisiera Vargas Llosa, es lo peor que pudiéramos hacer, pues nos condenaríamos al triste papel del imitador de barrio del cantante famoso y adinerado. Un patético inalcanzable.
Además el Norte no es un ejemplo a seguir en sentido alguno, pues sus pocos logros culturales les han costado miles de errores; por ejemplo, solo han descubierto los derechos humanos luego de masacrarse hasta lo inverosímil,luego de dos guerras mundiales, y de miles de años de barbarie. Barbarie que han frenado solo entre ellos, pero no hacia nosotros. Han descubierto la ecología luego de destrozar casi a totalidad su propio entorno natural y bastante del nuestro.
Lo que debemos aprender de noroccidente son las tácticas y estrategias de nuestra liberación para aprender a vencer de manera definitiva. Como Lautaro el joven mapuche que se mezcló entre españoles con dominio y fé, desentrañando el secreto de la victoria.
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